viernes, 23 de diciembre de 2016

DIVORCIO INCAUSADO



Actualmente la legislación Civil de nuestro Estado contempla tres figuras para dar por terminado el matrimonio: el divorcio administrativo, el voluntario y el necesario. Tanto el divorcio administrativo, como el voluntario se caracterizan porque hay acuerdo entre los cónyuges para dar por terminado el matrimonio y establecen una serie de requisitos para su trámite.

Sin embargo, cuando no hay acuerdo de ambos cónyuges, la única opción para dar por terminado el matrimonio, es el divorcio necesario.

El Código Civil para el Estado, en su artículo 141, establece diecinueve causales de divorcio necesario, lo que implica que para poder solicitar el mismo, es necesario acreditar la actualización de uno de estos supuestos, lo que representa un conflicto permanente para aquel de los cónyuges que busca disolver dicho vínculo, lo que lleva en muchas ocasiones a la fabricación de pruebas y a declaraciones falsas, que lo único que logran es lastimar a las familias, niños y adolescentes, que son miembros de las mismas y que se convierten en rehenes de los propios padres.

El reciente criterio emitido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, señala que exigir la acreditación de causales cuando no existe mutuo consentimiento de los contrayentes, incide en el contenido prima facie(a primera vista, o en principio) del derecho al libre desarrollo de la personalidad y en este sentido, se trata de una medida legislativa que restringe injustificadamente ese derecho fundamental; jurisprudencia que se transcribe para mayor claridad: 

 Décima Época Instancia: Primera Sala Fuente: Semanario Judicial de la Federación Materia(s): Jurisprudencia (Constitucional) Tesis: 1a./J.28/2015 (10a.)

 DIVORCIO NECESARIO. EL RÉGIMEN DE DISOLUCIÓN DEL MATRIMONIO QUE EXIGE LA ACREDITACIÓN DE CAUSALES, VULNERA EL DERECHO AL LIBRE DESARROLLO DE LA PERSONALIDAD (CÓDIGOS DE MORELOS, VERACRUZ).
 El libre desarrollo de la personalidad constituye la expresión jurídica del principio liberal de- “autonomía de la persona”, de acuerdo con el cual al ser valiosa en sí misma la libre elección individual de planes de vida, el Estado tiene prohibido interferir en la elección de éstos, debiéndose limitar a diseñar instituciones que faciliten la persecución individual de esos planes de vida y la satisfacción de los ideales de virtud que cada uno elija, así como a impedir la interferencia de otras personas en su persecución. En el ordenamiento mexicano, el libre desarrollo de la personalidad es un derecho fundamental que permite a los individuos elegir y materializar los planes de vida que estimen convenientes, cuyos límites externos son exclusivamente el orden público y los derechos de terceros. De acuerdo con lo anterior, el régimen de disolución del matrimonio contemplado en las legislaciones de Morelos y Veracruz (y ordenamientos análogos), que exige la acreditación de causales cuando no existe mutuo consentimiento de los contrayentes, incide en el contenido prima facie del derecho al libre desarrollo de la personalidad. En este sentido, se trata de una medida legislativa que restringe injustificadamente ese derecho fundamental, toda vez que no resulta idónea para perseguir ninguno de los límites que imponen los derechos de terceros y de orden público. En consecuencia, los artículos 175 del Código Familiar para el Estado de Morelos y 141 del Código Civil para el Estado de Veracruz, en los cuales se establecen las causales que hay que acreditar para que pueda decretarse la disolución del matrimonio cuando no existe mutuo consentimiento de los cónyuges, son inconstitucionales. De acuerdo con lo anterior, los jueces de esas entidades federativas no pueden condicionar el otorgamiento del divorcio a la prueba de alguna causal, de tal manera que para decretar la disolución del vínculo matrimonial basta con que uno de los cónyuges lo solicite sin necesidad de expresar motivo alguno. No obstante, el hecho de que en esos casos se decrete el divorcio sin la existencia de cónyuge culpable no implica desconocer la necesidad de resolver las cuestiones familiares relacionadas con la disolución del matrimonio, como pudieran ser la guarda y custodia de los hijos, el régimen de convivencias con el padre no custodio, los alimentos o alguna otra cuestión semejante.
Con el divorcio incausado, cualquiera de los cónyuges puede solicitar la desvinculación; lo que no lo exime de la responsabilidad sobre la alimentación, cuidados y la repartición de los bienes, lo cual se define y especifica en un convenio que se presenta junto a la solicitud de desvinculación matrimonial.


B. J. Zaragoza

martes, 20 de diciembre de 2016

Los farolitos vs McDonald’s

McDonald's

No importa el impacto visual, el platillo de Los Farolitos es más sabrosa y màs economica.


Ahora  está de moda el odio hacia los mexicanos de parte de una gran numero de estadounidenses, gracias a la influencia del flamante presidente electo Donald Trump; no quiere decir que el odio nace con Donald; sería necio pensar así. Los norteamericanos siempre y por el correr de la historia, han mostrado su desprecio hacia los mexicanos, no con palabras en público, pero sí con hechos; si tienen razón o no, no es el punto, tampoco creo justo, decir que ellos son malos y los mexicanos los buenos. Lo cierto es que nos ven, como el rico mira al pobre e ignorante; puede regalarle una moneda o bien verlo con desprecio sin darle nada.

Los norteños, han sido sutiles en su actuar, en su decir; les gusta guardar las formas; las mismas que Donald ya no quiere seguir simulando y le dio la gana de hablar abiertamente contra los mexicanos y cualquier raza que no sea blanca.

En México; acostumbrados a tratar a mexicanos incultos e ignorantes de la historia; se desviven para decir que estamos preparados para enfrentar una crisis por las amenazas del nuevo presidente norteño; empresarios, políticos, gobiernos federal y  de los Estados, se envalentonan, y dicen que no pasará nada. Pero el colmo, es la promesa de López Obrador que dice…” hablaré con Donald, para que no cancele el Tratado de Libre Comercio ni levante el muro” Otro Imbécil, que controla las masas con la “droga” llamada religión…” le pedimos a la virgen para que toque el corazón de Donald…” Espero que el próximo presidente del país vecino no le haya dado tiempo de leer estas patéticas expresiones; porque seguramente tendría un ataque de risa.

¿Cuál es la realidad? Que no estamos preparados, como gobierno, ni como pueblo.

¿Porqué? Porque México quiere ser campeón mundial de la corrupción; es posible que ya lo sea. Porque no incentiva el ahorro interno; porque no produce lo que consume; porque no tiene tecnología; porque su economía está basada en el petróleo; porque los que gobiernan a México no son los más preparados, sino los que pueden comprar votos.

¿Qué se puede hacer? Mucho.

Las bravuconadas del electo; se puede contestar seleccionando a nivel nacional las empresas estadounidenses y dejar de comprar en ellas; es una certeza que no pasa nada, si dejan de compra por ejemplo en McDonald`s o en Wal-Mart, por decir de dos empresas; porque además de vender caro y de mala calidad, explotan a nuestros connacionales. Los empresarios; aceptar la invitación de China; hacer negocios con Alemania y otros países europeos. Claro, se nos exige calidad y competencia; pero lo mismo piden los vecinos del norte.

En las próximas elecciones ya no vender el voto a los vividores del presupuesto; no adquirir deudas en dólares ni en pesos, optimizar el gasto; conseguir otra actividad adicional para incrementar los ingresos. No es la primera vez que sucede esto; hemos sufrido invasiones armadas en el pasado. Debemos reforzar nuestro orgullo nacional, no confiar en falsas promesas de gobernantes corruptos; cada quien debe tomar las providencias necesarias al respecto. 



 B. J. Zaragoza

Hamburguesa de carne de Los Farolitos